FICHA TÉCNICA
Título Original: My Mistress
Año: 2014
País: Australia
Duración: 104 min.
Director: Stephen Lance
SINOPSIS
My Mistress nos lleva a algo que comienza como una aventura amorosa y
extrañamente inocente entre un vulnerable adolescente y una amante
sadomasoquista francesa, que pronto se convertirá en algo peligroso; en
una historia de amor provocativa y poco convencional.
CONTENIDOS
Tipo de relación: Ama/esclavo
Presencia BDSM: Media
Estética: Fetish, Látex, Juguetes
Escenas explícitas: Escasas
DESDE LA MAZMORRA
Película que ha pasado desapercibida por las carteleras de todo el mundo, pese a contar en su principal papel con la genial y preciosa Emmanuelle Béart. El título y el cartel puede llegar a resultar un tanto engañoso, puesto que a primera vista podría pensarse que el grueso de la película está dedicado a la relación Dom/sub de sus protagonistas, y pese a que lo cumple en parte, no es una relación puramente sadomasoquista. La película comienza de una manera demasiado convencional, una hermosa mujer se muda a un vencindario donde vive un guapo chico, él comienza a sentirse atraído por ella, comienza a espiarla y descubre el BDSM en la vida de la hermosa mujer. Comienza a sentir curiosidad, pero personalmente considero que siente curiosidad por quién interpreta el rol de Ama más que por las prácticas en sí. Entre ambos comienza una relación de amistad que poco a poco se irá convirtiendo en una relación amorosa. El chico pasa a ser una especia de asistente personal que ayuda a la bella Dominatrix a vestirse para sus sesiones con otros esclavos... el BDSM está presente en todo el film en mayor o menor medida, puesto que es el hilo conductor de toda la trama, pese a que las prácticas no sean demasiado numerosas y demasiado escasas si la pareja protagonista asumen los roles de Dominatrix y esclavo. Un dato a tener en cuenta es la reacción de ella al final una sesión en la que es el chico quien recibe los castigos, una reacción de repulsa al hecho de castigar a quien ama, para entregarse luego al más puro estilo vainilla... De ahí la sensación a que se perciba el sadomasoquismo por algo perjudicial, y eso no debería ser así. Lo mejor, ver a una hermosísima Emmanuelle Béart enfundada en látex y vestida para matar.
IMÁGENES
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